Cuando conversé con Pedro Glenni, noté en sus ojos la sincera y profunda tristeza de un padre. Sentí realmente su dolor, la tristeza de conocer el desenlace del errado camino que adoptó su hijo. No disimuló el enorme dolor por la conducta de su hijo adoptivo, su "hijo", que ahora lo ha llevado a estar tras las rejas, luego de asesinar cruelmente al estilista Marco Antonio.
Aquí una parte de la entrevista a don Pedro Glenni, entrevista que comparto, porque nos muestra a un gran hombre, a un padre que eligió ser padre de Coco y que no tiene la culpa de los errores de su hijo.
“Le pido perdón a la familia de Marco Antonio porque así como su hijo ha muerto, hoy yo siento que el mío también ha muerto”. Palabras de perdón de un padre que sufre, de un hombre que no tiene la culpa del mal camino que siguió su hijo, camino que lo llevó a convertirse por dinero o venganza, en el asesino de Marco Antonio.
Pedro Glenni reveló que crió a Coco desde que este tenía tres años de edad, cuando sus padres lo abandonaron. Coco efectivamente, no es hijo biológico de Pedro. Fue abandonado por su padre cuando nació. Su madre hizo lo mismo cuando cumplió 3 años. Desde entonces, Pedro lo acogió en su hogar, en su familia, le dio su apellido, mucho cariño, en nombre del amor que sintió por su madre, por eso se quiebra al hablar de él. Es que bien dicen que padre es el que cría, no solo el que engendra, por eso Coco, creció rodeado del amor de Pedro Glenni y sus abuelos.
Coco estudió primaria y secundaria en colegio particular, no tuvo lujos, pero tampoco vivió en la pobreza. Estudió inglés en una prestigiosa academia, ingresó a la universidad Gracilazo a la carrera de administración, pero no pudo estudiar, debido a que la situación económica de su padre hace 4 años, se resquebrajó. Fue en ese momento, a los 17 años, que conoció a Marco Antonio. Comenzó a ganar dinero como modelo y anfitrión de su peluquería, y al mismo tiempo empezó a alejarse un poco de la familia. Se fue a vivir solo. Al poco tiempo, tuvo un hijo con su compañera del colegio.
Sin embargo empezó a cambiar, al hacerse amigo de Pucho y su pandilla, quienes según su padre, lo envolvieron en el submundo de la delincuencia y drogas. "Esas malas juntas tienen mucho de culpa en esto que le ha pasado a mi hijo", recalcó.
Agregó, además, que hasta el momento el único contacto que ha mantenido con Jorge ha sido a través de la línea telefónica. "Me ha dicho que no me preocupe, que va a estar bien y que lo disculpe por lo que hizo".
Como se recuerda, Jorge Luis Glenni fue capturado a los pocos días de la muerte de Marco Antonio y confesó haber cometido el crimen en compañía de otros dos sujetos, ahora también detenidos, Miguel Angel Velasquez, alias Pachón y Jordan Pachecho, ambos familiares de Pucho.
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