jueves, 20 de agosto de 2009

Humanos inhumanos...


Quien atenta contra un animal, mas tarde lo hará contra un humano. De eso estoy segura, pues no me cabe en la cabeza como una persona puede ser tan cruel con una mascota, con un animal, con un ser vivo...
Todos deberíamos tener los mismos derechos, pero no es así. De hecho, cuando se atenta contra una mascota, no te aceptan la denuncia en la comisaría.
Si te roban a tu perrito o si le disparan, como ocurrió con el perro sereno de Magdalena, lo escriben en el cuaderno de ocurrencias, porque atentar contra ellos, no constituye delito en el Perú, solo es una falta, una falta ética que no es sancionada.
Si te roban a tu mascota, si capturan a quien te lo robó, lo sancionarán de acuerdo al monto que valga tu perro, porque lo catalogan al igual que un celular o cualquier objeto que te puedan quitar. Es decir, si es un perro fino, quizás el delincuente vaya preso, pero si es chusco, no. No llega al monto mínimo de 400 soles.
Por eso me indignó ver como los alumnos de la facultad de medicina experimental asesinaban a las mascotas de otros, que ladrones inescrupulosos robaron para vender a 20 soles cada uno. Acaso ellos no tienen mascotas???
Como puede ser posible que practiquen, que experimenten con los animales de otros, con seres que son parte de nuestras familias, con perritos, canarios, gatos, no sé cualquier animal que adoptemos en casa.
Los animales son un miembro mas en nuestros hogares. Jamás olvidaré que vi llorar a mi padre por primera y única vez, cuando su perrito Chiqui murió. Acaso estos estudiantes no sienten lo mismo?
La batalla de la señora Carmen, fue inspiradora. Gracias a ella, que buscó a su perrito robado, llamado Tomas, otras personas recuperaron a sus mascotas en el laboratorio de la universidad San Marcos, una alegría no completa, porque cuando vi a Tomas, todo se hizo obvio. No era el mismo, estaba sedado por la anestesia, convaleciente por la fuerte dosis.
Otras personas también llegaron hasta la facultad de medicina experimental de la universidad de san marcos, para rescatar a sus perritos, pero no tuvieron suerte.
Fue testigo, de cómo conforme transcurrían los minutos, la angustia crecía, al igual que la cola de espera, es por eso que al conocerse que había un can sin dueño, esta joven nos dio muestra de amor incondicional.
Ella dijo que era suyo, mintió, pero lo hizo para salvarlo. Lo hizo en nombre de su mascota perdida, y por todos los animales que no tienen quien los defienda. Sino hubiese tomado tan heroica decisión, ese perrito ya estaría muerto, pues tenía el abdomen depilado, lo iban a abrir para experimentar.
De la misma forma, minutos después, los demás rescataron a un perrito asustado, que escapó del sótano de este laboratorio. Temblaba de frío, por eso fue socorrido por este joven que decidió llevárselo para darle un nuevo hogar. Mientras hablaba las lágrimas caían. Eran lágrimas de dolor, de impotencia, por cómo se sacrifican a estos inocentes animales, que gracias al profundo amor de sus dueños, lograron ser rescatados.
Pero solo fueron 4, los perritos rescatados, de los mas de 20, que se especula tendrían escondidos en esta facultad, que al parecer ha olvidado, que las mascotas, son parte de nuestras familias, con derecho a vivir.

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